Iris Fontbona Viuda Chilena Heredera de un Imperio Minero

Iris Fontbona, posicionada por Forbes en el décimo puesto con la fortuna más acaudalada de latino América, y en el octogésimo segundo es el puesto a escala mundial,  viuda de Andrónico Luksic Abaroa que perdió el altercado contra el oscuro cáncer, fenece en el 2005 dejando a sus apreciados hijos, María Gabriela, Jean-Paul, María Paola, Andrónico y Guillermo Luksic, Tres de ellos son el retoños producto del vínculo de la valorada unión con Iris.

Con el penoso descenso de su conyugue, siguió su travesía de separaciones desafortunadas, pero en este caso con su hijo Guillermo Luksic, donde el cáncer también fue el malaventurado protagonista, situaciones que la conllevaron a ser la beneficiaria de la Antofagasta Plc junto a sus hijos.

La heredad Antofagasta Plc es originaria de chile, es la colosal y desmesurada compañía dedicada al ámbito minero en todo chile, obteniendo tonelajes de cobre en cátodos, molibdeno y selecto oro. Poseen planes con la poderosa nación americana además tienen esquemas de indagación minera en el mapa, globalizándose con la expansión de sus alcances como corporación. Asimismo es la creedora de Quiñenco un aglutinado que cotiza en bolsa en rendimiento bancario.

La hotelería también es su fuerte ya que es acreedora de hoteles en total tres cadenas hoteleras situadas en Croacia, para la familia es imprescindible la contribución referente a fundaciones por ende sostienen una variedad sus apelativos son; Fundación Andrónico Luksic Abaroa, Fundación Educacional Oportunidad, Fundación Ena Craig, Fundación Luksic.

Iris Fontbona representa una cuantía familiar poderosa y abundantemente generosa socialmente, son unas d las columnas patrocinadoras del notable teletón, siendo auxiliares en aportes monumentales a favor de niños con acentuadas discapacidades, con su incursión en este ámbito buscan promover la introducción o inserto de los niños.

Su innumerable consecución en lo social, e inclusive su titánica empresa, le ha cedido a Iris Fontbona y a sus retoños una cifra que muchos quisieran, un emporio de más de $13.500 poderosísimos millones.