Nicolas Anelka, el gitano del futbol

Nicolas Anelka es un destacado futbolista francés, que para el año 2008 estaba considerado como el jugador que más ha generado dinero en relación a sus traspasos por diferentes clubes europeos. Poseedor de un extraordinario talento en la cancha y siendo un anotador potente, sin embargo, su carrera internacional ha estado marcada por eventuales periodos en paro y una que otra decepción.

Natural de la comuna francesa de Le Chesnay, Nicolas Anelka, nació el 14 de marzo de 1979, de padres naturales del departamento de ultramar de Martinica. De condición atlética desde su infancia, entre los deportes practicados en su edad temprana están el atletismo, el fútbol y el tenis. La posición de delantero la ostenta desde que comenzó en el FC Trappes-St Quentin, a la edad de 7 años, demostrando su potencial velocidad. Profesa la religión musulmana en la que tomo el nombre de Abdul-Salam Bilal.

Participando en los equipos de Clairefontaine y el Paris Saint-Germain, en su adolescencia, Nicolas Anelka potenció su técnica y se proyectó como un futuro futbolista profesional. Al cumplir 17 años fue traspasado al Arsenal de la Premier league en donde debutó con victoria ante el Manchester United. Luego de ser elegido Jugador Joven del año 1999 en la PFA, su carácter, las demandas y actitudes empleadas para un salario más justo le agregaron el apodo de Le Sulk, el malhumorado.

En 1999, como parte del conjunto merengue y debido nuevamente a su carácter, Nicolas Anelka se granjeó la enemistad de sus compañeros, de la afición y del entrenador del Real Madrid. Llegando incluso a la suspensión por 45 días.

El Paris Saint-Germain, el Liverpool, el Manchester City, el Fenerbahçe, el Bolton Wanderers, entre otros lo mantuvieron entre sus filas en un periodo de tiempo que va entre el 2002 y el 2007, con una actuación entre excelente y buena por parte de Nicolas Anelka, este peregrinar por diferentes equipos movió la suma de más 124 millones de euros por su figura y se extendió hasta el año 2013 en donde participo en la parrilla de otros equipos como el Chelsea y el Tottenham Hotspur, manteniendo la titularidad en diferentes torneos debido a su excelente actuación.

Como parte de la selección absoluta de Francia, Nicolas Anelka, destacó en la cancha dejando de lado su antigua actitud problemática, sin embargo, en el periodo que va entre 2000 y el 2008 su participación ha sido opacada debido a conflictos con la gerencia y la inestabilidad de su carrera en los clubes europeos, perdiéndose la Copa Mundial del 2006.

Actualmente está sin equipo y es criticado por las presuntas malas asesorías que le imparten sus hermanos mayores y que han afectado sus decisiones y comportamientos en los diversos clubes por donde ha pasado, a pesar de ser un destacado delantero y brillante anotador.